Vladímir Putin, el presidente de Rusia, celebró su victoria en las elecciones presidenciales, asegurando su quinto mandato con un 87.28% de los votos, según datos provisionales anunciados por la Comisión Electoral Central del país. Esta elección marca un hito en la historia electoral rusa, con Putin acumulando un total de 76 millones 277 mil 708 sufragios, en un proceso que se extendió a lo largo de tres días.

El resultado, que confirma la popularidad continua de Putin en Rusia, ha sido elogiado por los portavoces del Kremlin como una "victoria absoluta". Dmitri Peskov, el portavoz presidencial, rechazó firmemente las dudas occidentales sobre la legitimidad de los comicios, señalando que el nivel de apoyo popular subraya la aprobación generalizada de la política del presidente ruso.

En estas elecciones, el candidato comunista Nikolái Jaritónov obtuvo el segundo lugar con un modesto 4.31%, seguido por el representante de Gente Nueva, Vladislav Davankov, con un 3.85%. Mientras tanto, el ultranacionalista Leonid Slutski quedó en la cuarta y última posición con un 3.2%.

Putin, de 71 años, logró su mayor victoria electoral hasta la fecha, a pesar de los desafíos planteados por la guerra en Ucrania y las sanciones económicas occidentales. La alta participación ciudadana, que alcanzó el 77.44%, marcó un hito en la historia electoral rusa.

Con este resultado, Putin seguirá siendo el presidente de Rusia durante otros seis años, tras los cuales tendrá la opción de presentarse nuevamente a la reelección. En 2020, Putin reformó las cláusulas de la Constitución que anteriormente limitaban su tiempo en el Kremlin.

La oposición rusa no pudo participar en las elecciones, ya que las autoridades no registraron a sus candidatos, quienes abogaban por la paz en Ucrania.