John Barnett, quien fuera parte de la plantilla de Boeing durante 32 años antes de abandonar la compañía en 2017, fue encontrado sin vida en Carolina del Sur en lo que las autoridades han catalogado como un aparente suicidio. Barnett, de 62 años, había expresado previamente su preocupación por los problemas de producción de la empresa, según informes de la BBC.

La oficina del forense del condado de Charleston confirmó que Barnett falleció a causa de una herida de bala autoinfligida. Aunque la policía de Charleston está llevando a cabo una investigación, aún no se han proporcionado detalles adicionales sobre las circunstancias del trágico suceso.

Boeing emitió un comunicado expresando su pesar por la muerte de Barnett y ofreciendo condolencias a su familia y amigos. El abogado de Barnett, Brian Knowles, no ha respondido a las solicitudes de comentarios hasta el momento.

Según se informó a Corporate Crime Reporter, Barnett se encontraba en medio de una deposición como parte de una demanda de denunciantes en Charleston relacionada con la producción del avión 787 Dreamliner.

Barnett había cobrado notoriedad mediática luego del incidente ocurrido el 5 de enero en un avión Boeing 737 MAX 9, cuando un panel se desprendió en pleno vuelo, exponiendo a los pasajeros al aire exterior y obligando a realizar un aterrizaje de emergencia.

Este suceso, sumado a otros problemas de seguridad y calidad, ha sumido a Boeing en una crisis, enfrentándose a la intervención de los reguladores estadounidenses y experimentando retrasos en las entregas en toda la industria aeroespacial.