Este sábado, en ciudades de Europa, Oriente Medio y Asia, cientos de miles de personas tomaron las calles para mostrar su apoyo a los palestinos, al mismo tiempo que el Ejército israelí intensificaba su ofensiva en la Franja de Gaza, tanto por aire como por tierra.

Las calles de Londres se llenaron de multitudes que marcharon en el centro de la capital, exigiendo al Gobierno del primer ministro Rishi Sunak un alto el fuego. 

En línea con la postura de Washington, el Gobierno de Sunak no ha solicitado un alto el fuego, sino pausas humanitarias para permitir que la ayuda llegue a la población de Gaza. El Reino Unido ha respaldado el derecho de Israel a defenderse después del ataque del 7 de octubre por parte del grupo militante Hamás, en el que, según Israel, fallecieron 1.400 personas, en su mayoría civiles.

El número de víctimas mortales en Gaza se ha elevado a 7.650, también en su mayoría civiles, desde que comenzaron los bombardeos israelíes hace tres semanas, según un informe diario publicado por el Ministerio de Salud palestino el sábado.

En Kuala Lumpur, Malasia, miles de manifestantes se congregaron frente a la embajada de Estados Unidos, mientras que en Bagdad, Irak, la población se sumó a una concentración. En Cisjordania, territorio bajo ocupación israelí, manifestantes palestinos clamaron por un boicot global a los productos israelíes al unísono de la consigna: "No contribuyas a la matanza de los niños de Palestina".

En diferentes partes de Europa, las calles se llenaron de manifestantes en ciudades como Copenhague, Roma y Estocolmo. A pesar de la prohibición de concentraciones en algunas ciudades de Francia desde el inicio del conflicto, una pequeña protesta tuvo lugar en París, mientras que varios cientos de personas se manifestaron en la ciudad de Marsella.

En la capital de Nueva Zelanda, Wellington, miles de personas portando banderas palestinas y pancartas con la inscripción "Palestina libre" marcharon hacia la Casa del Parlamento. En Londres, se aplicaron restricciones especiales a las protestas cerca de la embajada israelí.

La marcha del sábado en Londres transcurrió de manera pacífica, aunque la policía informó de dos detenciones: una por agresión a un agente de policía durante el recorrido de la marcha y otra como sospechosa de un delito de orden público con agravante racial, después de que un hombre profiriera comentarios racistas. La policía estimó la participación en el rango de 50,000 a 70,000 personas.

En los últimos días, la policía londinense ha sido objeto de críticas por no tomar medidas más enérgicas contra las consignas expresadas por algunos manifestantes durante una marcha en apoyo a Palestina que tuvo lugar en la capital la semana pasada y que reunió a unas 100,000 personas.