Miles de personas necesitan desesperadamente la ayuda humanitaria, un primer convoy entró este sábado en la Franja de Gaza, antes de que la ONU pidiera un «alto el fuego humanitario» del conflicto desatado hace dos semanas por el sangriento ataque del movimiento palestino islamista Hamas contra Israel.

Los camiones cruzaron por el puesto de Rafah, y entraron a la Franja de Gaza, enclave palestino bajo asedio desde que Israel declaró la guerra a Hamas.

Un «alto el fuego humanitario» para «poner fin a la pesadilla» solicitó António Guterres, en la «Cumbre por la paz» en El Cairo, a la que asisitieron dirigentes y ministros de Relaciones Exteriores de países árabes y países occidentales, y de la Unión Europea, EU un emisario de menor rango.

Es necesario enviar combustible a Gaza, un bien vital para el funcionamiento de hospitales en este territorio donde los habitantes carecen de agua y electricidad, insistió la ONU.

Israel afirma que abatió a mil 500 combatientes del grupo islamista en la contraofensiva para recuperar el control de las zonas que penetraron los milicianos de Hamas en el sur del país.

Al menos 17 empleados de la agencia de la ONU para los refugiados palestinos (UNRWA) están entre los fallecidos en Gaza, lamentó este sábado su jefe, Philippe Lazzarini.